La naves del éxodo humano que está contruyendo la Fraternidad de Gobiernos del Planeta Tierra ya se ven claramente en el espacio sobre cientos de ciudades del planeta. Según fuentes de la Corporación de Megaconstrucciones Galácticas, encargada de la dirección de los trabajos, el ensamblaje de las naves espaciales va viento en popa como le gusta expresar al ingeniero jefe de relaciones con los medios.
El 24 de enero de 2115, cuatro días después de que activistas de la Resistencia, como ellos se denominan, o terroristas como los denominan los gobiernos, una unidad de partisanos de la zona del este de Serbia se ha apoderado de una nave policial de transporte y ha asaltado con éxito una de las naves que construye el consorcio de gobiernos, y que en realidad es una cárcel de seguridad donde han empezado a concentrar a los presos miembros de la Resistencia.
En una operación relámpago la unidad partisana serbia han rescatado y trasladado a zona libre en los Cárpatos meridionales o Alpes de Transilvania a los activistas detenidos hace unos días en Manhatan, entre los rescatados se encuentra en perfecto estado de salud Francis Herrera el Profeta. Por supuesto esta acción ha tenido el apoyo logístico de partisanos rumanos que mantienen la zona donde se supone se refugian libre de tropas mercenarias de los gobiernos, a pesar de los fortísimos combates que se suceden, pero lo escarpado de los montes y la frondosidad de los bosques inmemoriables forman una barrera infranqueable soportando continuos bombardeos con armamento de destrucción masiva.
El ingeniero jefe de relaciones con los medios contesta a un incómodo periodista que la explosión que ha destruído la nave situada sobre Serbia se ha debido a un acto de sabotaje por un empleado de la corporación que tenía problemas siquiátricos, que no hay supervivientes, que eso no era una cárcel sino una de las naves del éxodo que ahora habrá que volver a montar, y que por supuesto no ha habido ninguna acción bélica por parte de la Resitencia, cuyos líderes siguen a buen recaudo en dependencias de detencción de Google and Yahoo Corporation en Nueva York City. Seguro que tendrán un juicio justo y por lo tanto, no duda de que serán condenados a la pena capital por sus crímenes. Con estas palabras y una amplia sonrisa ha dado por terminada la entrevista.
© Antonio Salvador Manchón Alonso. San Fulgencio (Alicante) 2015.
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Esto es un fragmento del escrito: ¿Comunicando con Dios?
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